El pasado 26 de mayo tuvimos el placer de asistir al recital de poesía de Magdalena Sánchez Blesa organizado por la Asociación de Lengua y Cultura en la ciudad de Gante
Murciana de Puerto Lumbreras, Magdalena S. Blesa presentó su último libro “Instrucciones a mis hijos”, repleto de pensamientos y reflexiones. Cuando era pequeña encontró en la escritura una infinidad de caminos a los que agarrarse y dar forma a sus inquietudes. Estudió Filología Hispánica y Arte Dramático, pero su auténtica vocación es la poesía. En 2015 comenzó a hacer video-poemas recitados por ella y gracias a las redes sociales ha conseguido que sus poemas se viralicen y den la vuelta al mundo.
Previamente, el equipo de Hispagenda tuvo el honor de hacerle una entrevista.
Hispagenda: Hemos visto que has presentado tu libro en muchas partes de España y queríamos preguntarte por qué Gante.
Magdalena: Gante, porque mis vídeos han viralizado mucho, llegó a manos de AlenCu y gracias a ellos he podido venir a recitar aquí para los españoles. Y sí, he estado en casi toda España y ahora empiezo por la parte del Norte. A finales de año me voy a México con una editorial grandísima que se llama Urano México y voy a empezar por la zona de allí aunque lanzan el libro desde España.
H: ¿Tienes pensado traducir tus libros a algún otro idioma?
M: Pues la editorial que he mencionado anteriormente quiere traducirlos a varios idiomas. Es una idea muy buena, porque este es un mensaje muy universal. Mi mensaje yo pretendo que llegue a cuanta más gente mejor, ya que es el legado que le dejo mis hijos para que hagan un mundo mejor.
H: Podemos ver que tus hijos son una fuente de inspiración en tu último libro Instrucciones para mis hijos, por lo tanto, ¿a qué público va dirigido?, ¿tienes otra fuente de inspiración aparte de tus hijos?
M: Este último va dirigido a mis tres pequeños solamente, lo que pasa que ha tenido esa repercusión que tienen las cosas grandes. En la puerta de casa he querido escribir unos poemas a mis hijos para que no se pierdan por el mundo, para contarles lo que me enseñó a mí mi madre. Instrucciones a mis hijos viene de ella pero se dirige a mis hijos. Ella supo inspirarme porque era como un ángel de inspiración para mí e incluso en silencio me inspiraba. Ella me decía siempre “no te pierdas, jamás, la vida de nadie” y entonces es lo que yo estoy aplicando en mi vida diaria, no perderme la vida de ninguna persona porque me enriquece muchísimo para escribir y es una forma de dejarle a mis hijos ese legado de mi madre y que pase ahora a ellos. Por lo tanto, lo pueden leer todos los hijos del mundo.
“JAMÁS UNA HUiDA
POR MUCHOS QUE SEAN.
JAMÁS NINGÚN MIEDO,
Y SI ACASO OS DIERA,
JAMÁS OS LO NOTEN»
H: ¿Qué fue lo que te llevó a escribir?
M: La muerte de mi padre cuando yo tenía 8 años. Y como fue tal la tristeza que me dejó en el corazón, yo no lo supe encajar tan pequeña. Mi padre era para mí muy grande. Me hacía mucha falta en aquel momento y como ya veía que la tristeza se estaba apoderando de mí, con mi corta luz de niña, dije que tenía que hacer algo que me evadiera de tanta tristeza y drené mi pena con la tinta de mi bolígrafo para poder sacarla.
H: Hemos visto que eres muy polifacética, que además de poeta, eres actriz y has hecho una película. Nos gustaría saber cómo surge esto.
M: Es una forma de contar cómo el ser humano tiene la capacidad de no estar parado ante las adversidades más grandes. La película se llama Las aventuras de Moriana y la hicimos con Terele Pávez y un elenco importante de actores españoles y con mi familia. La historia de la película es mi historia en relación con mi negocio, un restaurante, pero esa historia la contó mi marido porque él es guionista y director de cine (David Pérez) y la contó a través del humor combinado con el drama. Es decir, trata de como una familia se repone de una caída tan grande, de no poder resistir la crisis en España, de ver cómo su restaurante se viene abajo y dicen “¿ahora qué?”. Cada uno tiene que saber dominar su vida y en ese momento dije “¿qué sé hacer? cine”, pues decidimos hacer una película para que nos conociera más gente y no tener que cerrar el restaurante. Es una forma de darle cuerda a la vida siempre, de ser palanca y rueda, de no estar parado, de tener siempre iniciativa.
Tráiler de la película “Las aventuras de Moriana”
H: Después de saber que eres actriz, que eres poeta y que regentas un restaurante, ¿dónde te sientes más cómoda?
M: Escribiendo. De hecho yo me denomino a mí misma “poeta de aceras y de patios”, poeta de la gente más sencilla, de la gente más triste, más cansada, más sola, que han tenido dificultades en la vida. Intento pensar un poco en ellos, meterme en su papel y pensar en qué necesita esta gente, porque yo lo he pasado ya y no olvido nunca los lodos en los que he remado. Como digo en un poema “soy de la estatura de quien tengo enfrente”, voy buscando siempre esas palabras que ayuden, animen, saquen a la gente adelante y digan “yo puedo también, no hay un sueño imposible”. Ese es mi mensaje para los demás y para ponerlos en pie.
“me denomino a mí misma “poeta de aceras y de patios”, poeta de la gente más sencilla, de la gente más triste, más cansada, más sola”
H: ¿Cómo consideras que está el mundo de la poesía actualmente?
M: Yo creo que quieren que ahora la poesía esté de moda a la fuerza. El mundo siempre ha necesitado la poesía, siempre ha existido poesía y poetas buenísimos que han dejado un legado maravilloso. Lo quieren poner de moda como que es una cosa que se ha inventado ahora y no es así. Pero creo que hace mucha falta la poesía porque es capaz de cambiar corazones. Por ejemplo, hace poco, recité en un pueblo de Andalucía y cuando terminé de recitar, se me acercó un hombre después del poema de La madre y me dijo ”me voy corriendo a casa a tratar bien a mi madre” y ahí ves que la poesía mueve corazones.
H: ¿Podrías dar un consejo a los jóvenes poetas que están empezando?
M: Pues que no lo dejen nunca porque la poesía es un arma, como decía Celaya, cargada de futuro, que está haciendo al mundo pensar. A través de la poesía se puede dejar algo muy importante para los demás. Toda esa gente que está empezando, que siga, que se cultiven mucho, que lean mucho y que trabajen mucho porque la poesía hay que saber hacérsela llegar a los demás de una forma muy sencilla para que la entiendan. Si empiezan a ver que no saben lo que estás diciendo, la gente se espanta y se va hacia atrás, pero como entiendan el lenguaje sencillo de un poeta, los tienes enseguida en el bolsillo. La poesía tiene que hacer efecto en el corazón.
